sábado, octubre 29, 2022

SU DANZA...

 



Su danza en blanco y negro. El blanco de ojos abiertos a lo infinito del universo. El negro, un luto postergado que ahora hacía balanceo en la pesadez de sus piernas. Se miraba en el espejo con su movimiento sigiloso, sinusoidal, con la lentitud de los años que se le venían. Su cabello, recogido, se entregaba a plateadas lunas cada nocturno. Una música con sabor a pena tejía cada uno de sus pasos, monótonos, cansados. Pero ella, continuaba con su danza en blanco y negro. Avistaba su ayer, solitario, en las esferas enrarecidas de una libertad. Una libertad invocando a sus callados labios, su silencioso vientre. Su danza en blanco y negro. Extenuada interpretaba cada uno de sus deseos, idos, abandonados en la acera del olvido. El olvido de que amo ….que amo con la entereza de sus sentidos. Ahora, con sus danza en blanco y negro llega  a ese presente donde se precipita un duelo, marmóreas mareas la esperan, todo ha terminado, el espectáculo de su danza se ha entregado al adiós. Ella frente al espejo, inspira e espira con cierta pena. No haber amado más. No haberse entregados a los sabores de sus pasiones. No se arrepiente, su danza en blanco y negro oscila en la penumbra del nocturno. Un piano se deja ir mientras ella, callada, sigue con su ritmo hasta el fin de sus días. Cien octubres ondulan en su cintura. Cien otoños donde se ha mantenido al frente de la belleza de su danza en blanco y negro. El blanco de sus ojos abiertos en lo inacabado de su vida. El negro de un duelo a ras de su corazón.  Y ahora entregada a su danza en blanco y negro es lúcida, es travesía de su tiempo imperfecto donde el querer ausentado pesan en sus hombros.

martes, octubre 25, 2022

Los susurros de la paz


 

Los susurros de la paz, cautelosos invocan las estrellas, un cosmos donde las almas son compasivas con el canto de la herida. Los susurros de la paz, más allá de un horizonte donde el sol decae, se evanece cuando la luna luce su traje blanco. Los susurros de la paz, los esperamos, aquí, donde las grietas profundas profanan la calma. Ojos invertidos en la desolación, en la pena que se elonga a la nada, al vacío. Sin embargo, los susurros de la paz, vienen…vienen altos y fuertes con cosquilleo de los vientres ansiosos a su recibimiento. Los susurros de la paz, de una esperanza luciendo en los jardines donde el aliento se hace homogéneo a los sentidos de la vida…una vida grata. Una vida justa. Una vida de equilibrio entre los susurros de la paz y la madre tierra. Ahí está, pájaros envueltos en arcos de colores, seres esculpiendo su mañana y la sonrisa del corazón. Míralos ahí, abrazados en los columpios de las manos. Sus manos, nuestras manos. Los susurros de la paz, viene con sus pasos encontrados, viene con su canto alto, viene con el olvido del ayer. 


viernes, octubre 21, 2022

LOS PASOS...


 

Los pasos idos….pasos diluyéndose en un firmamento donde los astros emanan el destino. Los pasos venideros…pasos donde se consumen los años en la existencia de unos ojos lamiendo sus heridas. Los pasos…pasos del ahora, del ya que se nos esquiva en el discurso de los pájaros volando a ras de nuestros sentidos. Un árbol quieto luce su otoño evaporado. Un árbol de la madre tierra anuncia el verdor del mañana, del presente. Los pasos, aquí, en un instante que te pienso, que converso con los hombros caídos, con las manos vacías donde las ballenas mueren.

sábado, octubre 15, 2022

DIVAGACIONES DE UNA MAÑANA DE OCTUBRE

 



El rincón donde se aman los sueños, recorridos inconsciente donde la verdad aprieta. El letargo nos hace cómplice del cansancio y nos liamos a las alas muertas de las horas, en la noche, cuando la luna canta. Mecidos por las manos de la tierra nos entregamos al soplo natural de nuestros sentidos, en vertical. Respiramos una y otra vez y en la placidez y armonía del universo somos ojos disueltos en la oscuridad. Y los sueños vienen…vienen precisos, vienen en la premonición de despertares bajo el oleaje de una isla. Bosquejamos una escalera en el rincón donde se aman los sueños. Subimos y subimos hasta rozar el cielo aun negro. Esperamos el amanecer y lo grandioso de un sol, de estas estrellas nos aviva a continuar. Ahora, aquí, examinando el mundo, examinándonos a nosotros. Una pausa y somos el leve airecillo de las ventanas abiertas a las mareas del hoy.

jueves, octubre 13, 2022

octubre

 


Un canto ausente. Conversan los nubarrones por carreteras al horizonte. Lejos…estas lejos. Me levanto, examino cada pedazo de mi reconditez. Mi vientre se entrega al temblor. Lejos…estas lejos. Las olas murmuran. Las olas, pasivas, vigilan mi destino. Estoy aquí con el canto ausente. El querer no se dirige a mi y siento desplomarme en la pesadez de los años. Octubre…una mañana de octubre cuando en la isla lloran los desquiciados que apartan al sol. Un sol brillante. Un sol reflejo de nuestra conciencia. Un sol que alimenta la conversación por las calles.

domingo, octubre 09, 2022

HORIZONTE....

 

El horizonte se nubla, una intermitente llovizna atiza sobre las espaldas. Andamos en el sentido de las gaviotas, de pardelas que a ras de la orilla observan su presa. Solas, en medio del vacío somos puente elevadizo donde las cicatrices manipulan nuestro sol, nuestro mañana. Y sin embargo continuamos como gotas de un llanto lejano, ausentándose cuando nuestros ojos conversando con el horizonte que se nubla reflejan el agotamiento. Las sensaciones se tambalean y somos hijas de un océano que nos alimenta, que engulle todo mal alejándolo de nuestra nada. El horizonte se nubla y nos pensamos y nos hablamos con el gozo de un presente detenido en un candelario.

jueves, octubre 06, 2022

BUSCABA


Buscaba en lo más lejano de las cumbres, cumbres pinceladas por las mareas sonoras de esta isla. Buscaba donde los barrancos me decían que bajara, que subiera…barranco abajo, barranco arriba. Buscaba en la reconditez de mi corazón, donde mi vientre se camufla y expande cierto tremor cuando te escucha, cuando la tonalidad de los cielos en las entrañas de la calima visita mis ojos. Buscaba con los ojos cerrados en la memoria cabizbaja, en un deseo donde los sueños los describen como una verdad. Una realidad lejos…muy lejos. Y mientras te buscaba, la lectura de un periódico me ensimismaba lacónicamente. Tanta y tantas desgracias, un llanto feroz hincando sus colmillos en mi pecho y mi pulso en pausa liada a una punzada lamentaba…lamenta. Ya no soy joven. Ya no soy mayor. Solo una existencia que se mira en un espejo cuando barranco abajo, barranco arriba te busca. Y sin tu saberlo, te hallo, aquí, en un pedazo de un firmamento que me habla de ti cuando los cuerpos duermen. Ahora, sin que nadie lo sepa, silbo un tal vez, un quizás, un a lo mejor no lleguemos a encontrarnos. Buscaba donde las lluvias cuecen la pesadez de un mes de octubre. Buscaba donde la nada es conocedora del todo. Calles donde lo callado es aviso. El aviso de un mañana, un mañana donde el aire de tu aliento abrace mis labios. Te desvió y me asiento en las noticias…no buenas…no buenas. Esta atmósfera está petrificada, acorralada por lo virulencia del ser humano. Buscaba, allá, en donde los acantilados hablan, donde los pájaros se posan a ras de mis pies…cansados.