viernes, febrero 27, 2009

A la sombra de tu danza


Tambores, cornetas
A la sombra de tu danza
Que es tan gratificante
Al marcar el ritmo
Cierto y puro de tus manos tersas
Sobre mis senos.
La pasión cognoscible
Adquiere besos agigantados
Donde tus labios de jardines perdidos
En la inmensidad de una luna menguante
Es lluvia torrencial del sudor
Apetecible a medida que hacemos el amor.
Incansables somos ternura y lentitud
Que se difumina con el largo sueño
Evolucionando a la cima de la plenitud
Tambores, cornetas
A la sombra de la sensualidad
Que explosiona con la tonada
De las primeras aves de la madrugada.
Me miras y en el irradiar de tu fuerza
Galopa sobre mí llamas serpenteantes
Que bucea en el sabor del sexo
Que incauta el corazón sibilino
De las corrientes apegadas al olor
De nuestros ojos

jueves, febrero 26, 2009

La huída





-Tocas con prisa. El retumbar de mi puerta es eco de las profundidades de tu huída.
-Si, María. Mi ser se consume en una lluvia negra. Me siento desvalida, decaída, cansada.
-Por qué mujer, que es lo que te arrastra a las tinieblas insomnes de la balada eclipsada.
-Me arrastra la mano atroz que surca por mi cuerpo, por mis sentimientos.
-Anda siéntate y pasa aquí la noche.
-Gracias María.
María se sienta en la cocina y frente a ella Inés. En el centro de la mesa un jarrón con bellas flores, un jarrón que da todo su aliento a esa mujer ennegrecida por la maldita mano y voz grosera.
-Quieres un café o mejor una tila.
-No, no quiero nada María. Solo deseo caminar de nuevo. Caminar por la diversidad de este pequeño mundo con valentía. Pero, no puedo. ¡No puedo¡ Me hecho tan cobarde. Es como un círculo vicioso. Siempre dentro de casa con mis labores. Siempre bajo ese techo que es lecho de una serpiente venenosa que me empuja, que me empuja por un precipicio de soledad y silencio. Solo sus gritos. Solo su puño.
La noche convoca a una niebla que se introduce por cada uno de los poros de ellas. La noche convoca palabras en que las llamas de una vida y el arco iris de otra se entremezclan para dar una misma mujer. María e Inés se abrazan, el calor de una y el manar de una luz glacial de la otra las transforman en una misma ave. Unidas e influenciadas por una ciudad oscura recorrerán aceras hasta que un añejo árbol cascado por la polución las llame. Allí, en una de sus ramas posarán. Verán pasar el tiempo, el tiempo perdido, el tiempo que en su recogimiento será cuenco de estrellas donde beberán del mañana.

sábado, febrero 21, 2009


Esa laurisilva
Que vuela por la rítmica alegría
De un piano desembocando
En la danza del sol,
En la danza de las aves.

jueves, febrero 19, 2009

Explorando el sueño...

Explorando el sueño
Que me arraiga a tu mirada
Asciendo por una colina de estrellas
Donde la calma me reitera el deseo.
Suavemente escucho el trinar de los pájaros,
Suavemente recorro mis pechos
Con leve esculpir de la acaricia
Que como flores invernales
De un universo opaco
Se enraíza en mi corazón, en mi corazón.
Explorando el sueño
Que desciende por cometas rojas
Hasta erupcionar esferas de espejos
Donde la danza del amor
Se vuelve tenue llama de la identidad
De dos cuerpos similares
En el vuelo de un desierto
Preñado de vergeles
Donde se ejerce la espera, la espera.

martes, febrero 17, 2009

Los sueños(prosapoesía)

Los sueños, se envuelven en ese celeste caudal donde raíces se incrustan cuando las constelaciones vigías erupcionan en la oscuridad. Aterrizan en el paseo que el alma afligida es llamarada de una ilusión, de una esperanza. Los sueños, vienen como arenas movedizas que despintan el vago retorno de la felicidad. Náufragos cuya voz se ofusca en las inmensidades de un océano que tiembla de hambre. Los sueños, obstruyen el despertar en el sentido de lágrimas de navajillas que brotan de mis ojos y surcan levemente mi tez. Náufragos que con la antorcha amarilla de la vida se va volviendo distorsionada y triste. Los sueños, me embarcan a la deriva de una realidad que eclosiona cuerdas flojas donde el canto a la prosperidad es cerrado por la infertilidad de las mareas.

lunes, febrero 16, 2009

Tus manos(poesía)


Tus manos,
Rincón de la más bella fortaleza
Con la hiedra trepando
Contempla mi cuerpo.
Tus manos,
Se identifica con el susurro de un arco iris
Que en silencio bucea por mis párpados
Suavemente, suavemente.
Tus manos,
Edifican un suspiro
En el misterio de una noche cerrada
Mecidas por un reloj que no da las horas
En el tiempo de amar.
Tus manos,
Vienen a mí revistiendo mi piel
De una calidez caudalosa
Donde la paz se impone
Al descomunal roce de tormentas
Que reviran esta tierra.
¡Tus manos¡
Me adentro en ellas
Y bebo de ellas
En la travesía de miles de aves
A través de la luna.

domingo, febrero 15, 2009


El comienzo de la jornada
Donde el viento en círculos
Nos habla de la vida, de la naturaleza.
Contemplo la caída de las estrellas
Y con ellas alargo mi respiración.

sábado, febrero 14, 2009

Pasan las horas (poesía)


Pasan las horas
Y ella como cuerpo desnudo
Agiganta sus pisadas
Por una orilla
Limitada por rocas de cristal.
La tarde tiene cabida
En su viaje
En las profundidades del océano.
Triste, opaca, apagada
Lanza al aire su último suspiro,
Un suspiro de esferas
Que la envuelve en magmáticos sueños
Donde su ser vuela en libertad.
Cansada, es valiente tonada de fuego
A la vez que sus raíces
Se consagran a la tierra.
Las sombras aparecen,
Sombras que la tapian
Entre rojas montañas
Donde un mirlo duerme.
Se recuesta junto a él
Y en su mente borda
La esperanza teñida de corales
Cuya fortaleza le ofrece el firmamento.

viernes, febrero 13, 2009

"Tierra de Cuentos"

Bueno, he ilustrado un libro de cuentos cuyos beneficios van destinados a la Fundación Vicente Ferrer. Lo podéis encontrar en LuLu y se llama “ Tierra de Cuentos”
http://www.lulu.com/content/6061198

martes, febrero 10, 2009

Surge así...(relato)




Surge así, como mujer de raíces que se arrodilla ante los sueños quebrados. El viento azota, pero ella inamovible gira su grito a la luna. Llamas blancas la recorren en la aventura de ser mujer de su tiempo. Apagada, melancólica acaricia sus senos, secos de tanto silencio. Apagada, nostálgica acaricia su vientre, árida montaña de donde emana su temblor. Se levanta y con el acogimiento de las constelaciones se yerta frente una playa vacía. Playa donde las olas son rompiente con las azabaches rocas. Se da cuenta que hay una cueva más bien ya lo sabía. Se dirige a ella. Se introduce. La oscuridad son cadenas de su piel rugosa y áspera. Allí se tiende y comprende su fallo, sus errores. De repente en el centro de la cueva una hoguera mana en forma de cuerpo de mujer. Una hoguera que con sus lanzas quemantes anaranjadas se aproxima a ella. Le habla.
- Dime mujer del viento ¿Qué vienes a buscar?
- Mi vacío. Me hallo vacía.
- ¿Vacía?
- Si, como esas cometas blancas en el cielo que no dejan ver su destino.
- ¿El destino? El destino es el que tú marques. Es ese por el cual los sueños nos yerguen.
- Ay, amada hoguera. La soledad me apresa, la soledad me acosa, la soledad es gélida flecha que se incrusta en mi pecho y me hace revolcarme en tempestades tenebrosas. ¿Ese es mi destino?
- ¡La soledad¡ Ven conmigo yo soy tu amante, tu amor. La repuesta cierta y verdadera de quien busca el amor.

Ella se dirige a la hoguera. Penetra en ella. Y en la fundición de sus cuerpos, uno de brasas y otro de hielo, se transforman en uno. Surge así, como mujer nueva, como mujer de pensamientos nuevos para las rutas de la vida.

domingo, febrero 08, 2009

Se aproxima la lluvia...(poesía)


Se aproxima la lluvia
Y con ella el revolotear de la nostalgia
Nos embarca en un plano infinito
Donde el amor no llega, no llega.
El viento es voraz, es ola gigantesca
Que nos lleva al encuentro de un nocturno
Donde la agitación de la soledad nos hostiga.
Nos rendimos y entre la bruma gris
Nuestros pasos se vuelven ausencia, ausencia.
Nos ahogamos y en el naciente de la calma
Erupcionamos sobre rocas de espejos
Donde nuestro cuerpo desnudo danza
El invernal canto de la oscuridad.
Se aproxima la lluvia,
Corretea con todo su poderío
Por nuestro destino incierto e infértil
La humedad es lamento invencible
Que con su tempestad nos arranca
De los puentes por donde nuestras alas
Dan el grito de la alegría,
Tambores y flautas es el cristalino claro
Que luego se percibe
Entre montes de papel y de arco iris.
¡Si¡
Surge el encantamiento ante una gruta
Donde los vencejos anidan y
Allí está, allí está
El sobrevolar a ras de sus llamaradas
Que revelan el origen de esas cascadas
Donde el girar y girar de sus labios
Se posan con los míos.
¡Si¡
Perderme bajo ti
Confiada de que los nubarrones
Serán seda suave en el contacto
De tu piel con la mía.
¡Vientre con vientre¡
La llamada de la luna que nos hace
Sumergirnos por lenguas de rosas
En la lenta acaricia.